Misión Santa Josefina Bakhita, Virginia, 21 de enero 2014
“Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños.” (Mt 11, 25)
Queridísima Madre Elvira, aunque ya te saludamos por teléfono deseamos hacerlo también por escrito para decirte una vez más lo importante que eres para nosotros y para agradecer a Dios por habernos dado una Madre como tú! El domingo participamos con todos los niños en la Dedicación de nuestra Iglesia, que gracias al coraje del Padre Adrián y a su fe, hoy es una Casa de Dios grande y acogedora y, como dijo nuestro Obispo en la homilía, Casa de todos. Y pensar que hace solo tres años, la iglesia de nuestra parroquia estaba desnuda, sin piso, sin puertas ni ventanas… verdaderamente es cierto que Dios todo lo que quiere lo hace. Mons. Luis recordó al Padre Adrián con mucho, mucho afecto, diciendo que su estilo de vida simple y su fidelidad a la oración, seguramente han dejado una huella en el corazón de muchos parroquianos, dijo también que la Iglesia es el lugar en el que se viene a rezar, es decir, a hablar, pero especialmente a escuchar, lo que Dios tiene para decir a nuestra vida. El Padre Paul, que ahora es nuestro párroco, en estas semanas nos ha demostrado mucha amistad y estima, nos pidió participar activamente en las celebraciones cantando algunas canciones con gestos después de la lectura del Evangelio. Ensayamos algunas y fue muy bello cantar y bailar con nuestros niños. En seguida después, en la homilía, nuestro Obispo dijo: “El Padre Adrián, además de haber construido una iglesia, también ha traído a Liberia una Comunidad religiosa: agradecemos a estas hermanas y a estos laicos porque son un testimonio de cómo se puede caminar de las tinieblas a la luz y de por qué cuidan a nuestros niños.” En este período sentimos a Dios muy cerca, que se manifiesta en el rostro de muchas personas que son instrumento de Su Amor: un amigo español nos hizo llegar varias veces providencia de carne, una pareja austríaca trajeron ropa para los niños, un amigo libanés nos hizo llegar un importante regalo de Navidad con aceite, harina, azúcar…y muchas, muchas cosas, una familia amiga mandó pañales para nuestros niños y se comprometió en enviar una vez por semana una peluquera para los niños….y tantos otros gestos de amistad de nuestros vecinos que nos hacen sentir amados por ellos. De todos modos, querida Madre Elvira, GRACIAS…porque la alegría más grande es poder dar y cada sábado es un gran don poder dar de comer a 200 niños del VOA. Gracias porque esta experiencia nos hace entrar más en la cultura liberiana, nos hace apreciar lo que tenemos, nos ayuda a hacer sacrificios. Gracias por tu oración, te sentimos muy cerca: ¡nuestros niños rezan por ti…y también nosotros! Te encomendamos a la Virgen María, la Queen of Peace, con mucho, mucho amor. ¡Te amamos! ¡Feliz, Feliz Cumpleaños!! Tus hijos, hijas y nietos liberianos
ALBUM FOTOGRAFICO
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