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 Un grupo de jóvenes, de familias y de hermanos y hermanas del Cenacolo se encontraron el sábado 2 de mayo en el Santuario de Vicoforte, en Mondoví, para la vigilia de oración organizada por la diócesis de Piemonte en ocasión de la jornada mundial de las vocaciones.
Vivimos una recepción simple y alegre en la plaza del Santuario con cantos y bailes, intercalado por algunos testimonios de chicos y chicas de nuestra Comunidad.
Poco a poco la plaza se llenó de diversas realidades procedencias y carismas, pero todos unidos en un clima de sincera comunión y alegría. Por la tarde, desde la plaza partió una pequeña procesión en la que se rezó por las distintas vocaciones que el hombre está llamado a vivir como bautizado, como familia, como misionero, y en particular por las vocaciones religiosas. Una vez que entramos en el Santuario, la jornada siguió con la Adoración Eucarística iniciada bajo la mirada de María, a la que nos encomendamos con una oración de confianza.
Durante la Adoración las intervenciones de Mons. Arrigo Miglio de Ivrea, de Mons. Luciano Pacomio, obispo de Mondoví y de Mons. Gabriele Mana, obispo de Biella nos  hicieron descubrir el sentido de las palabras de San Pablo: “Sé en quien he puesto mi confianza”, palabras elegidas como lema de esta jornada de las vocaciones.
En el interior del Santuario cada capilla lateral se preparó de un modo diferente: había una parte dedicada a la presentación del Santuario, otra destinada al sacramento de la Reconciliación y una donde se podía adorar el Santísimo Sacramento. Fue una noche de oración en la que se sintió de modo fuerte la presencia de Jesús Resucitado y vivo en medio nuestro. Vivimos el ser Iglesia, unidos bajo la mirada de María, con la alegría de pertenecer a Él.
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