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“Padres convertidos, hijos salvados”
La Comunidad no pide una “cuota” a las familias de los chicos/as que recibe en las fraternidades, en vez aquello que se les pide a los padres es la conversión a un camino de vida cristiana pararalelo a aquel que recorre su hijo en Comunidad.
La esperienza de estos años ha evidenciado que el renacimiento del chico/a depende muchísimo de la voluntad de los padres en realizar un camino de vida cristiana, a la búsqueda de la importancia de “la familia”. Sor Elvira repite a ellos: “padres convertidos, hijos salvados”.
Las familias con el tiempo se han vuelto parte viva e importante de nuestra Comunidad, junto al camino de resurrección de los hijos que llaman a nuestras puertas.
La Comunidad organiza semanalmente encuentros de oraciòn para las familias.
Muchos de ellos realizan un serio camino de oración y conversión, que se vuelve testimonio de resurrección y de acogida hacia tantas familias laceradas.
Los responsables de los grupos de padres se encuentran disponibles semanalmente en varios centros de escucha para recibir a las familias en búsqueda de ayuda.
La cruz del hijo drogadicto se vuelve motivo de relexión y de conversión profunda, de una renovada paz y serenidad familiar, de un redescubriemiento de las cosas verdaderamente importantes de la vida.
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